Un mapache ciego trajo a sus guardaespaldas de confianza, dos gatitos negros, a su proveedor de alimentos para que pudieran compartir comidas juntos.

 

Conoce a estos adorables amigos improbables.

Blind el mapache había estado viniendo a la casa de Eryn en Illinois para buscar comida desde el 2009. Por lo general, venía al jardín de su humano para tomar un delicioso desayuno buffet temprano entre las 6 am y las 9 am, ya a menudo regresaba para una comida extra o dos más tarde en el día.

"Sus ojos brillaban de color verde brillante durante el día. Estaba al menos parcialmente ciego, entraron en las cosas, y tenía miedo del viento, alta hierba, los pájaros y la nieve," dijo Eryn.

A fines de octubre de 2014, dos pequeños gatitos negros aparecieron en las afueras de su patio cuando el mapache vino por su alimento diario. Los gatitos se hicieron amigos de él y comenzaron a seguirlo, como sus propios guardaespaldas.

"El mapache estuvo cerca por al menos cinco años antes de que los gatitos aparecieran mágicamente en el bosque", comento Eryn.

Cuando llegó el mapache para alimentarse, los gatitos se pusieron en marcha mientras aprendían rápidamente que su compañero los llevaría a una fuente de alimento abundante.

El 13 de noviembre de 2014, Eryn pudo capturar al trío con la cámara cuando aparecieron en la mañana para tomar un buen desayuno y se retiraron al bosque después de que pulieron sus platos.

Los fieles gatitos escoltaron a Blind Raccoon de regreso al bosque como sus ojos.

Después de cinco buenos años, el mapache falleció en junio de 2015. En ese momento, ya había superado la vida promedio de un mapache (2-3 años).

"Un mapache ciego / discapacitado que sobrevive al menos cinco años es bastante tiempo. Fue un milagro".

Pero los gatitos fueron devastados sin su compañero. Eryn comenzó el proceso de domarlos. Después de innumerables rasguños y mucho alimento, consiguieron que los gatitos se ganaran su confianza y amor.

"Ahora viven adentro con nuestro otro gato Squirt, dijo Eryn.

Se estimó que los gatitos tenían alrededor de seis meses de edad.

"Resultó que necesitaba a los gatitos negros tanto como me necesitaban a mí. Domarlos me ayudó a sobrellevar ligeramente la pérdida de mi madre y mi gato de 15 años dentro de los nueve días de diferencia.

"Antes de que mamá contrajera la gripe que terminó enviándola a la sala de emergencias, ella dijo que quería mantener a los gatitos ... (y) no quería que se enfriaran en el bosque".

Con la ayuda de su padre, Eryn pudo cumplir el deseo de su madre y le dio a los dos hermanos felinos un hogar siempre lleno de amor.

"Son muy diferentes a los gatos que hemos tenido. Usan mucha comunicación con sus colas, juegan y pelea constantemente".